Ciudad de Guatemala, 3 noviembre (Diestra).- Las comunidades indígenas comenzaron este viernes dos días de manifestaciones en la capital guatemalteca para exigir la renuncia de la fiscal general del país, María Consuelo Porras,
«Ya no la queremos, renuncie por dignidad», le dijeron los dirigentes indígenas durante su concentración en las afueras de la sede central del Ministerio Público (MP), situada en el barrio Gerona de la Ciudad de Guatemala.
Fue el primer punto al que llegaron miles de manifestantes que llegaron en autobús a la capital desde el interior del país para expresar su respaldo a otros pobladores indígenas que desde el 2 de octubre se instalaron en el MP, como parte de las medidas de presión, que incluyeron el bloqueo de carreteras durante 20 días, para que renuncie Porras.
Sin embargo, ella está aferrada a su puesto para el que fue nombrada por el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, para el periodo 2022-2026. Es el segundo periodo consecutivo en el que Porras dirige la Fiscalía.
Del MP, la marcha se dirige a la Corte de Constitucionalidad (CC) y por último a la Plaza de la Constitución, frente al antiguo Palacio de Gobierno, en pleno centro histórico de la ciudad.
Las manifestaciones pacíficas de dos días fueron convocadas por las autoridades ancestrales de los 48 Cantones de Totonicapán para exigir la dimisión de Porras, de lo fiscales Rafael Curruchiche y Cynthia Monterroso, y del juez Fredy Orellana.
Ellos son señalados de atentar contra el sistema democrático guatemalteco al querer revertir los resultados de las elecciones celebradas este año al haber secuestrado a finales de septiembre las actas electorales con los resultados de las votaciones bajo el argumento de que buscan evidencias de un posible fraude denunciado al MP.
En una de las investigaciones realizadas por la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) que dirige Curruchiche, Orellana ordenó la suspensión temporal del Movimiento Semilla, del presidente electo Bernardo Arévalo, por supuestamente utilizar firmas falsificadas para convertir la organización política en partido.
La suspensión quedó firme el jueves una vez terminado el periodo electoral un día antes. El caso seguirá en las cortes.
«Estamos unidos para decirle a este Gobierno que el pueblo está despierto y va a resistir el tiempo que sea necesario. No hemos claudicado con el hecho de levantar los bloqueos de las carreteras y pedimos la solidaridad de los países del mundo porque Guatemala está defendiendo su democracia», dijo una líder indígena durante la marcha.
Y es que durante 22 días los indígenas bloquearon las principales rutas de la red vial del país, lo cual causó millonarias pérdidas a la economía y brotes de violencia por el descontento que provocaron al tapar las carreteras. Foto Diestra.
