Ciudad de Guatemala, 1 mayo (Diestra).- Miles de guatemaltecos conmemoraron este miércoles el Día Internacional del Trabajo y reclamaron a los tres poderes del Estado el respeto a sus garantías y que se derrote a la impunidad.
En un pronunciamiento, el movimiento sindical y populares del país expresó que a 138 años de la lucha histórica de la clase trabajadora que comenzó en Chicago (EE.UU), «demandamos mejores condiciones de trabajo, protección social y respeto a la libertad sindical»
El futuro de las prestaciones laborales está bajo asedio del sector empresarial, lo que ha provocado que millones de guatemaltecos trabajen en la economía informal, lo cual es «condenable».
Han habido transformaciones pero la explotación de la clase trabajadora no ha cambiado en Guatemala desde la década de los cincuenta que con las políticas neoliberales han hecho más ricos a los ricos y más pobres a los pobres, señalaron en el manifiesto.
En su opinión, ello ha provocado «un terrible atraso» en el país, ya que el abuso de poder y la corrupción instalaron organizaciones criminales en las instituciones del Gobierno a todo nivel con el apoyo de empresarios y militares y otras mafias, y el resultado «es un país con grave atraso social, económico y político».
Los trabajadores pidieron garantías para que se respeten sus derechos y se derrote a la impunidad. Exigieron también a los tres poderes del Estado el respeto a las leyes en beneficio de los empleados.
Mensaje del presidente
El presidente Bernardo Arévalo recibió en las afueras del antiguo Palacio de Gobierno la marcha de los trabajadores y en su mensaje renovó los compromisos con los valores fundamentales de la democracia, para, dijo, «imaginar juntos el futuro que podemos construir y para comprometernos a avanzar».
«Somos protagonistas de la historia, el pueblo trabajador y el Gobierno. El Código de Trabajo es un logro histórico que mantiene vigencia en el siglo XXI», les dijo.
Hace casi 80 años los trabajadores de Guatemala encontraron en un grupo de revolucionarios un aliado fiel para la demanda de igualdad.
«No hay democracia sin justicia social, y no hay justicia social sin democracia. Nos corresponde a ustedes y nosotros retomar ese legado de tener un mundo diferente y con dignidad que supieron ver nuestros padres y abuelos», declaró.
Fue durante el Gobierno del presidente Juan José Arévalo, el padre del actual mandatario de Guatemala, que cobró vigencia el Código de Trabajo en el país centroamericano en la década de los cuarenta.
Estos primeros tres meses de Gobierno han sido complicados y de mucho aprendizaje. «Asumimos el Gobierno en medio de un deterioro institucional y desastre de corrupción, un estado en ruinas», les expresó Arévalo.
Enfatizó que la nueva generación de jóvenes progresistas «nos seguimos enfrentando a la mezquindad, a la élite corrupta y que se resiste a abandonar las instituciones, pero contamos con un aliado que no se rinde que es el pueblo de Guatemala».
