La Opinión
El condado de Thurston en Washington vivió una escena de película de terror, luego de que una mujer fue enterrada viva por su esposo en una tumba poco profunda, por lo que logró escapar y ponerse a salvo.
De acuerdo a declaraciones de la policía del condado, la mujer se escondió detrás del cobertizo en el patio de una casa cercana al lugar donde se encontraba bajo tierra, quien fue localizada por las autoridades locales durante la madrugada del lunes.
La mujer fue encontrada con señas de tortura; “Todavía tenía cinta adhesiva alrededor del cuello, la parte inferior de la cara y los tobillos. Tenía grandes hematomas en las piernas, los brazos y la cabeza, y su ropa y cabello estaban cubiertos de suciedad”, señalaron los oficiales.
El agresor, Chae Kyong An de 53 años, fue detenido, pero no ha sido formalmente acusado, actualmente se encuentra en prisión del condado, luego de que, durante una audiencia preliminar, un juez accedió a la solicitud del fiscal de retenerlo sin derecho a fianza, según la Oficina del Fiscal del Condado de Thurston.
En las declaraciones de la víctima, señala que fue atacada en su casa después de hablar con su esposo sobre su divorcio y dinero, Kyong An le ató las manos a la espalda con cinta adhesiva y le tapó los ojos, los muslos y los tobillos, y amenazó con matarla.
Cuando oscureció, la mujer logró liberarse de la cinta adhesiva. Escapó de la tumba y corrió durante unos 30 minutos, hasta que encontró un hogar. Alguien en la casa llamó al 911, según la declaración judicial.
La policía obtuvo un video de vigilancia de los vecinos de la camioneta de Kyong An estacionada en la casa. También tienen un video de él ingresando al garaje con la camioneta y luego saliendo a toda velocidad del vecindario, según el informe.
El hombre enfrenta cargos de intento de asesinato en primer grado, secuestro en primer grado y asalto en primer grado.
