MIAMI.- Este año, Fort Lauderdale desbancó a Miami Beach como el destino predilecto para los jóvenes en busca de sol y diversión durante las vacaciones de primavera, como resultado de las recientes restricciones impuestas en Miami Beach.

Con la imposición de toques de queda y otras medidas en la ciudad balneario de Miami-Dade, los turistas han redirigido su brújula hacia Fort Lauderdale, donde la fiesta continúa sin las mismas restricciones.

Tras no tener toque de queda, Fort Lauderdale no ha sido ajeno a los retos que conlleva el aumento de visitantes, enfrentándose a un incremento en el desorden público y actos delictivos.

Según la policía de Fort Lauderdale, se han registrado al menos diez arrestos relacionados con las vacacionistas de primavera entre el 4 y el 12 de marzo.

La policía local ha realizado múltiples arrestos por una variedad de delitos, desde disturbios hasta agresiones a la autoridad.

Este cambio de escenario ha generado opiniones encontradas entre los residentes y turistas. Algunos expresaron su preocupación por la seguridad y otros celebran el renacer de Fort Lauderdale como un destino icónico de las vacaciones de primavera.

La decisión de Miami Beach de imponer toque de queda se produjo después de 2 tiroteos durante las vacaciones del año pasado, que también resultaron en 488 arrestos. Más de 230 de esas detenciones fueron por casos de delitos graves.

El gobernador de la Florida, Ron DeSantis, anunció hace algunas semanas que se desplegarían más de 45 agentes de la policía estatal para reforzar la vigilancia en las vacaciones de primavera o Spring Break.

La situación en Fort Lauderdale se ve agravada por incidentes de violencia recientes, añadiendo una capa de urgencia a la demanda de medidas más efectivas para garantizar la seguridad de todos, según algunos residentes.

Varios videos subidos a las redes sociales muestran peleas entre bañistas, un excesivo consumo de licor e incluso drogas.