La Opinión
En la época de las redes sociales muchas personas se pueden volver reconocidas aún realizando acciones que parecerían no tener tanta importancia, tal es el caso de un hombre que se volvió una celebridad por comer pollos rostizados, en Filadelfia, Estados Unidos
Alexander Tominsky, de 31 años, se ha convertido en una celebridad local tras comer un pollo asado entero cada día durante 40 días en menos de 20 minutos, y el último día una multitud se reunió a su alrededor y coreó “Cómete ese pájaro” mientras él se comía el último.
Tominsky logró reunir a un centenar de personas en el cuadragésimo día para verle comer el último pollo en vivo y en directo, además de otras 30.000 personas en directo a través de Twitter.
Curiosamente, el reto no surgió por una apuesta perdida, ni por ningún beneficio económico, fue, según las palabras de Alexander, para hacer algo que le produce dolor para hacer sonreír a los demás.
Alexander dijo a medios locales que incluso para él “suena raro”, pero que “sentía que lo hacía por una razón muy importante”. Originalmente había planeado hacer sólo 30 días, pero añadió otros 10 cuando sintió que no había llegado lo suficientemente lejos.
Alexander había documentado su viaje con selfies diarios en Twittery había colocado carteles invitando a las masas a presenciar lo que sería su último festín de pollos en el muelle abandonado junto a una de las tiendas Walmart de la ciudad.
Ya no quiere más pollo
Una vez completado el reto, Alexander, que ha sido apodado ‘el hombre del pollo de Filadelfia’ dijo que necesita impío para reparar, pues en el proceso perdió alrededor de 7 kg de peso.
Además, el hombre de 31 años dice que ha perdido por completo el gusto por esa comida y que apenas soporta pensar en los pollos.
