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Elegida en 1992, Feinstein fue una activista a favor del control de armas y buscó a menudo el consenso con los republicanos, frustrando en ocasiones a sus colegas demócratas.
Por Rebecca Shabad y Dareh Gregorian – NBC News
La senadora demócrata por California Dianne Feinstein falleció a los 90 años, informó este viernes su oficina. Era la senadora de mayor edad, y la mujer que más tiempo ha servido en la Cámara Alta. Fue una destacada activista a favor del control de las armas de fuego, e intentó a menudo forjar consensos con los republicanos durante sus tres décadas de servicio en el Senado, en ocasiones incluso provocando la frustración de sus colegas demócratas.
El pasado mes de febrero anunció su intención de retirarse al final de este mandato, después de afrontar peticiones en ese sentido debido a su frágil estado de salud.
La salud de Feinstein llevaba meses en la mirada pública, después de que se ausentara del Senado por tres meses, tras recuperarse de un herpes zóster, una infección que puede causar una dolorosa erupción cutánea y por la que tuvo que ser hospitalizada en marzo.
Según un recuento de NBC News, la demócrata se perdió más de 90 votaciones durante su enfermedad, una ausencia muy sensible para los demócratas en el Capitolio, quienes tienen a un solo senador de ventaja sobre los republicanos y batallaron para confirmar algunos candidatos a puestos públicos del presidente, Joe Biden.
“He servido junto a más senadores que nadie», dijo Biden en un comunicado entonces, «puedo decir honestamente que es una de las mejores».
Feinstein estuvo sometida durante años a la presión de otros demócratas californianos para que dejara paso a una generación más joven de legisladores que pudieran ocupar su escaño.
Actualmente, un trío de demócratas de la Cámara —Barbara Lee, Adam B. Schiff y Katie Porter— está inmerso en una batalla para suceder a Feinstein en el estado demócrata en la elección de 2024.
El legado y trayectoria de Feinstein
La demócrata de California fue una gran promotora de las medidas de control de armas, defendiendo la prohibición de las armas de asalto que el entonces presidente Bill Clinton promulgó en 1994 y presionando para que se aprobaran leyes restrictivas desde que expiró la prohibición en 2004.
Además, como presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, Feinstein dirigió una revisión de varios años del programa de detenciones e interrogatorios de la CIA desarrollado después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, que condujo a una legislación que prohibía el uso de ciertos métodos de tortura.
Su postura centrista la convirtió en ocasiones en el foco de críticas de algunos miembros liberales del partido demócrata. Se separó de ellos en una serie de cuestiones, incluida la oposición a la ambiciosa propuesta climática del Green New Deal, que, según ella, era política y fiscalmente irrealizable.
Esas tensiones con los progresistas llegaron a un punto crítico durante las audiencias de confirmación de la candidata a jueza de Corte Suprema Amy Coney Barrett en octubre de 2020, cuando Feinstein abrazó al presidente del Comité Judicial del Senado, Lindsey Graham, republicano por Carolina del Sur, y le agradeció por cómo había dirigido la audiencia. Esa acción provocó rápidos pedidos de destitución de Feinstein como miembro de mayor rango del panel, y ella finalmente renunció.
Feinstein prefirió seguir las tradiciones del Senado que cambiarlas, aunque expresó su apertura en 2021 a alterar potencialmente las reglas obstruccionistas —conocidas como filibuster en inglés— si los demócratas no podían aprobar partes clave de su agenda legislativa, incluidas las reformas del derecho al voto, el control de armas y una reautorización de la histórica Ley de Violencia contra las Mujeres.
Feinstein, quien se casó tres veces, falleció un año después que su marido, el banquero inversionista Richard Blum. Le sobreviven su hija, Katherine Feinstein, jueza del Tribunal Superior del Condado de San Francisco; su yerno, Rick Mariano; y su nieta, Eileen Feinstein Mariano.
