Ciudad de Guatemala, 23 mayo (Diestra).- Casi 11 años después de su fallecimiento el 11 de agosto de 2011, y nacido el 11 de febrero de 1922, Doroteo Guamuch Flores, el guatemalteco que venció en la maratón de Bostón (EEUU) el 19 de abril de 1952, aún es recordado como uno de los grandes deportistas que han puesto en alto el nombre y le han dado gloria a su país pese a su pobreza.
Contra todas las predicciones, las zancadas del «chapín» nacido en la aldea Cotió del municipio de Mixco, en el departamento de Guatemala, dejó atrás a los miles de corredores de varios país para cruzar la meta en solitario y parar los cronómetros de los 42 kilómetros en 2h31m53s, mientras que el segundo lugar, Victor Dyrgall, de Estados Unidos, llegó casi 5 minutos después.
Hijo de los agricultores Laureno Guamuch y María Flores, Doroteo recibió como premio a esa gran hazaña mundial que el Gobierno guatemalteco le pusiera su nombre al Estadio Nacional de Ciudad de Guatemala que se llamaba Revolución, el más grande del país centroamericano,
Fue el triunfo de Bostón que lo hizo inmortal. En otras competencias, como en los Juegos Olímpicos del Helsinki en 1952 no tuvo tanta suerte y quedó lejos de los primeros lugares.
De albañil, como caddy en el Mayan Golf Club, y hasta de empleado en una empresa de hilos y tejidos marcaron también la historia de Doroteo, un católico, devoto y fiel seguidor de la procesión del Señor Nazareno de Mixco para la Semana Santa.
Su carrera deportiva la inició en 1941 hasta su retiro en 1957, y entre otros triunfos figuran la medalla de oro en los 21 kilómetros en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1950 disputados en Guatemala. También la plata en las justas de 1946 que tuvieron como sede Barranquilla (Colombia) en la media maratón y los 5.000 metros planos.
En 1955 en los II Juegos Panamericanos ganó el oro en la maratón y se convirtió en el primer medallista panamericano de Guatemala. En los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1954 en México ganó la plata en los 10.000 metros y el primer puesto en los 5.000 y la maratón
En su país natal no tuvo rival, Fue seis veces campeón de la media maratón Max Tott entre 1943 y 1953, y debido a un accidente en motocicleta en 1957 tuvo que abandonar su exitosa carrera deportiva.
En 1995 la salud de Doroteo se deterioró debido a un trastorno en un pulmón y debido a su falta de afiliación al Seguro Social, no pudo ser atendido en ese hospital, sino llevado a uno de la Fuerza Armada, donde logró recuperarse temporalmente.
Sin embargo, la larga enfermedad en los pulmones, lo que se le agravó con males crónicos del corazón, hizo que el recordado atleta falleciera a los 89 años de edad el 11 de agosto de 2011.
En marzo de 1991, recibió como homenaje y reconocimiento personal, el Galardón «La Ceiba de Oro», por sus proezas como deportista destacado guatemalteco.
