abc.es
Twitter sigue empeñada en que el juicio que, próximamente, la enfrentará a Elon Musk arranque lo antes posible. En una presentación realizada ante el tribunal de la Cancillería de Delaware, encargado del caso, la red social acusó al empresario, que se comprometió a pagar 41.000 millones de dólares por la plataforma para, después, (intentar) salirse del trato, de «ralentizar» premeditadamente el inicio del juicio mientras las dudas sobre el futuro de la empresa dañan a trabajadores e inversores.
Twitter quiere que el juicio -que se espera que sea complicado para ambas partes- arranque a mediados del próximo mes de septiembre. Mientras tanto, Musk espera retrasar el inicio, como mínimo, hasta febrero del año que viene. El objetivo del empresario sería recopilar más datos y profundizar en el número de cuentas falsas y de bots de ‘spam’ que operan en la red social; precisamente, el motivo que esgrimió hace algo más de una semana para romper el acuerdo de compra.
«Que la fecha del juicio sea los antes posible es imperativo. Esta disputa, muy pública, daña a Twitter con cada día que Musk está incumpliendo (el trato). Musk amplifica este daño al usar la propia plataforma de la compañía como un megáfono para menospreciarla», expresan desde la red social.
La empresa, además, remarca que las palabras de Musk están poniendo en riesgo su correcto funcionamiento y, como en tantas otras ocasiones, se pone el objetivo sobre el daño para los inversores de la red social: «Millones de acciones de Twitter cotizan diariamente bajo una nube de duda creada por Musk. Ninguna empresa pública de este tamaño y escala ha tenido que soportar estas incertidumbres».
Twitter espera que, llegado el momento, el tribunal de Delaware de la razón a la compañía y obligue al magnate a comprar la red social a cambio del precio acordado el pasado abril: 54,20 dólares por acción. Ahora mismo, el precio en bolsa es ligeramente superior a los 38 dólares.
Musk, por su parte, espera que la presunta falta de transparencia de la red social sobre el número de cuentas falsas que operan en su interior sea suficiente para salirse del trato y, además, sin necesidad de pagar ninguna penalización.
De acuerdo con ‘The New York Post‘, Musk y su equipo jurídico están trabajando para presentar una contrademanda contra Twitter. El plan del empresario sería recopilar más información sobre las cuentas de spam. La red social, por su parte, apunta que la auténtica razón por la que el magnate quiere romper el acuerdo es el empeoramiento la situación económica. Según información compartida por ‘The Wall Street Journal‘, Musk habría perdido 100.000 millones de dólares desde el pasado mes de noviembre.
