En Los Ángeles, los crímenes de odio surgen donde los inmigrantes viven como el Parque MacArthur Park y Koreatown; y hay menos, en lugares como el Valle de San Fernando, donde hablan inglés y se pueden defender.
“Los inmigrantes no hablan inglés, y no confían en la policía ni quieren acercarse. Piensan que si reportan el odio, no va a pasar nada”, dijo Ben Pak, presidente de la Korean American Law Enforcement Organization, durante una conversación con La Opinión en torno a la campaña Detengamos el Odio que es parte del programa Juntos contra el Odio.
“Cada vez que hay un evento como la pandemia, la guerra Israel-Gaza o cualquier otro conflicto, surgen más delitos de odio, graves o pequeños. Durante covid, los ataques de odio aumentaron en algunas partes entre 300 y 400% en especial contra los asiáticos”.
Reveló que a través de la organización de eventos en la comunidad, reúnen gente y líderes para enseñarles cómo reportar el odio.
“El LAPD tiene una página web para reportar ahí el odio, y cuando una persona llama al 311 o 911, y dice no hablo inglés y pide ‘español o coreano por favor,’ le van a poner un operador que hable el lenguaje para que reporte en su propio idioma”.
Hizo ver que no ha habido suficiente entrenamiento para los oficiales sobre cómo darle la importancia al tema de reportar los delitos de odio.
“Usualmente cuando el oficial es inmigrante, le pone más atención, y el Departamento de Policía de Los Ángeles tiene un fondo que recibió del gobierno federal para entrenar a un oficial sobre cómo hacer un reporte cuando llegue una llamada y cómo hacer las preguntas, pero no ha habido un entrenamiento formal”.
En cuanto a qué tan sensibles son los oficiales y alguaciles sobre el tema, dijo que es de 50-50, pero incluso las propias víctimas tampoco saben reconocer cuándo ocurre un incidente de odio.
“Muchas veces piensan que es un asalto de odio cuando por ejemplo, quien lo comete es blanco y la víctima es un asiático o latino. Eso es un asalto, no un crimen de odio, pero la víctima quiere que se tome como un crimen de odio solo porque la otra persona es de otra raza. Así que tenemos que educar al oficial y a la gente para que sepa que si le pegan, es un asalto, pero si al pegarle, le dicen ‘odio a los coreanos’, entonces es además un crimen de odio”.
¿Cuándo hay que reportar?
El líder de los oficiales y alguaciles coreanoamericanos en Los Ángeles, dijo que cuando hay un asalto físico o verbal, hay que reportarlo.
Pero reconoció que debido a que no hay suficientes policías en el LAPD, se hace difícil llegar a tiempo a atender una llamada de emergencia, y la gente se molesta.
“Faltan policías, y operadores del 911. Somos ahora 8,860, pero debían ser 10,000”.
Resaltó que es importante que las víctimas de delitos de odio, anoten toda la información sólida que puedan, como rasgos de la persona que les pegó o agredió, licencia de manejo, placas, fotos y cosas que pueden servir como evidencia para los detectives.
“Muchas veces no quieren reportar porque temen que los arresten por ser indocumentados, pero la policía nunca pregunta si son o no indocumentados; y la víctima no tiene que tener una identificación”.
Remarcó que lo importante es que los incidentes y delitos de odio se denuncien para poder combatirlos, y que la gente sepa dónde y cómo reportar.
“Una vez que se detecta que cierto tipo de crimen surge en un lugar geográfico, se van a dar más dinero a la policía para combatirlo”.
¿Los insultos verbales de odio se deben reportar?
“Mi sugerencia es que sí se deben reportar, en especial si toman fotos o videos para identificar a la persona porque hay quienes hacen eso a menudo. Si no reportan, nadie sabe y no se ataca”.
Cuando se trata de un ataque de odio verbal, recomendó reportarlo en la página web del LAPD, pero cuando se trata de un asalto físico, lo mejor es llamar al 911 para que los oficiales lleguen al lugar.
Comentó que los crímenes de odio son considerados como delitos federales que implican una sanción diferente, y sus perpetradores tienen que pasar más tiempo en la prisión.
“Cada persona que denuncia un crimen o incidente de odio tiene que decir cuánto quiere involucrarse. En Estados Unidos menos que en otros países, los agresores pueden regresar para actuar en contra de las víctimas, pero si no avisan de este tipo de casos, entonces el criminal va a seguir haciendo daño, porque no tiene ningún tipo de condena, y piensa que nadie lo va a parar porque la policía no llega”.
Señaló que aunque un incidente de odio no se puede perseguir legalmente como sí ocurre con un crimen de odio, de todos modos, se tienen que denunciar.
“Los latinos sufren mucho los delitos de odio. Es común escuchar insultos discriminatorios en su contra como ‘go back to your country’ pero por miedo o cualquier razón no lo reportan. Con la desaparición de covid, los crímenes contra los asiáticos han disminuido mucho”.
El mensaje del líder coreanoamericano es llamar al 911 cuando sean víctimas de un crimen de odio.
“La policía debe llegar, tarde pero tiene que hacerlo. Mi mensaje es que reporten, si el policía se comporta mal, en español pida que llame a su sargento o a su superior. Pero cada delito, tiene que ser reportado o no sabremos qué está pasando”.
Por tanto, llamó a los latinos y a los inmigrantes a no tener miedo, y si son víctimas de odio, deben reportarlo.