Ciudad de Guatemala, 22 abril (Diestra.- Guatemala ya tiene bajo control un brote de Guillian Barré que detectó a finales de 2023 que dejó al menos cinco muerto, por lo que las autoridades sanitarias bajaron la alerta de roja a amarilla al no registrarse desde el pasado 10 de marzo ningún un nuevo caso de la enfermedad.
El ministro de Salud, Oscar Cordón, explicó en una rueda de prensa que los alimentos mal preparados fueron el factor determinante para el brote de la enfermedad en el departamento de Suchitepéquez, en la costa sur del país.
En las pruebas de laboratorio que se realizaron «se detectó una presencia alta de compilobacter, lo que sugiere la transmisión de la bacteria en la comida», detalló.
Cordón sostuvo que desde el 10 de marzo de este año no se ha reportado ningún nuevo caso de la enfermedad y decidieron bajar la alerta roja que habían decretado en los departamentos de Suchitepéquez, Huehuetenango, Quetzaltenango, Retalhuleu, Escuintla y Sololá, a amarilla.
El ministro agregó que la aplicación de medidas higiénicas en los alimentos fue un factor importante en la contención de la enfermedad y recomendó a la población no juntar los alimentos crudos con los cocidos y no usar los mimos utensilios para su manipulación.
El director de Epidemiología, Edgar Santos, por su lado, indicó que el 40 por ciento de los casos registrados de Guillian Barré ocurrieron en Suchitepéquez y aunque la situación está bajo control, no se descarta que se pueda registrar un nuevo brote, alertó.
La viceministra de Salud, Linda Valencia, comentó que el 70 por ciento de los sobrevivientes de la enfermedad aceptar recibir ayuda psicológica mental debido a la depresión y la ansiedad con la que quedaron tras sufrir la enfermedad.
Guatemala contó con la cooperación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para investigar el brote de la enfermedad y según su representante en el país, Gerardo Alfaro, movilizar expertos de otras naciones como Perú, para realizar los diagnósticos.
